Ya hemos viajado a Italia, Francia y Grecia a través del cine. Ahora, con motivo del estreno de Una canción irlandesa, ¡qué mejor destino que esa tierra de leyendas y mágicos parajes para perdernos en ella! Os traemos una lista con algunas películas ambientadas en Irlanda, un lugar con grandes historias que explorar.
Michael Collins (1996)
El irlandés Neil Jordan (La Viuda) escribe y dirige este cuadro de la independencia de su país, a través de los rasgos y motivaciones del carismático líder Michael Collins. La película describe sus actuaciones, desde el levantamiento de Pascua de 1916 hasta su muerte en atentado terrorista, en 1922, en circunstancias no aclaradas. La película nos muestra la crudeza de dichas acciones violentas pero rodeada de un aura romántica que la convierten en un bello y triste film de gran belleza plástica. Y su reparto es espectacular, pues cuenta con Liam Neeson, Aidan Quinn, Stephen Rea, Alan Rickman, Julia Roberts, Ian Hart, Brendan Gleeson, Sean McGinley, Charles Dance, entre otras caras conocidas. Así que para adentrarnos un poco en la historia del país, es una película indispensable.
Once (Una vez, 2006)
Una de las películas ambientadas en Irlanda que más nos conquistaron. Glen Hansard es un cantante y compositor que interpreta sus canciones por las calles de Dublín, cuando no está trabajando en la tienda de su padre. Durante el día, para ganar algún dinero extra, interpreta conocidos temas para los transeúntes, pero por las noches, toca sus propios temas en los que habla de cómo le dejó su novia. Su talento no pasa desapercibido a Marketa Irglova, una inmigrante checa que vende flores en la calle. Ella tampoco ha tenido suerte en el amor y, para sentirse un poco mejor, escribe canciones sobre el tema. Pero, a diferencia de Glen, nunca las interpreta en público. Glen y Marketa, acaban de improviso haciendo un dueto en una tienda de música, y será entonces cuando descubran que algo les une. Magnífico musical indie que os enamorará.
Posdata: Te quiero (2007)
Seguimos con los dramas románticos. Hilary Swank protagoniza esta historia de superación donde su personaje trata de seguir adelante tras la muerte de su marido (interpretado por Gerard Butler). Pero descubre que este le ha dejado varias cartas antes de morir para que aprenda a lidiar con el dolor de la pérdida y empiece de nuevo a vivir. Estas le llevarán a los hermosos parajes de Wicklow, Irlanda, y aunque la historia esté algo azucarada, solo por pasear desde el asiento de casa por esos bellos lugares, vale la pena darle una oportunidad.
Tenías que ser tú (2010)
Vale, lo reconocemos. Es la típica comedia romántica americana llena de tópicos por todos lados. Pero nos descubrió a Matthew Goode, y la química con Amy Adams nos hizo soñar mientras paseábamos por la Irlanda de hermosos castillos, y nos dejábamos llevar por su mágico espíritu.
Para quienes no la conozcan, su trama es muy sencilla: una joven enamorada (Amy Adams) va a Dublín para pedirle a su novio que se case con ella. Lo hará siguiendo una tradición irlandesa, según la cual solo un día cada cuatro años -el 29 de febrero- una mujer puede proponer matrimonio a su novio con la certeza de que no será rechazada. Sin embargo, durante el viaje, una circunstancia imprevista la obligará a pedir ayuda a un rudo mesonero irlandés (Matthew Goode) con el que tendrá que caminar campo a través si quiere llegar a tiempo para hacer su propuesta de matrimonio. Simple, pero para nosotras efectiva.
El irlandés (2011)
Dejamos las comedias románticas y nos vamos al género policial. El sargento Gerry Boyle (Brendan Gleeson), un tipo sin pelos en la lengua, gaélico de pura cepa, sirve como policía en un pueblecito irlandés. A pesar de sus prejuicios racistas, el poco ortodoxo oficial se ve obligado a formar tándem con el agente del FBI negro Wendell Everett (Don Cheadle), que ha llegado de Estados Unidos para parar los pies a una banda de narcotraficantes, que han asesinado al compañero de Boyle.
John Michael McDonagh logra una enorme frescura mezclando varios géneros, como el thriller, el spaghetti-western, las ‘buddy movies’ ochenteras de parejas de policías incompatibles en la línea de Arma letal, entre otros. Sin duda, un film disfrutable pese a su falta de presupuesto, pero esta queda muy disimulada gracias a una factura técnica de primera. Y la pareja protagonista funciona genial.
Sing Street (2015)
Y para finalizar esta lista de recomendaciones, volvemos a un género que nos encandila. Este musical, ambientado en el Dublín de los 80, en plena crisis económica, sigue los pasos de Conor, un adolescente con unos padres que discuten mucho y problemas económicos. Debido a eso se ve obligado a ir a un modesto colegio masculino, llevado por los hermanos cristianos, que imponen una férrea disciplina algo desagradable. Encontrará un rayo de esperanza en la misteriosa Raphina y, con el objetivo de conquistarla, la invitará a ser la estrella en los videoclips de la banda que quiere formar. Ella accede, y ahora Conor debe cumplir su palabra.
Un filme brillante que trata las complejidades de la adolescencia. Y todo ello en un ambiente maravilloso, rodeado de canciones populares que nos adentran de lleno en esta magnífica historia que gustará a todo amante de la música.
Y hasta aquí nuestras recomendaciones de películas ambientadas en Irlanda. ¿Nos dejáis las vuestras en los comentarios?