¡Jurassic World: Campamento Cretácico ha regresado!
El parque está cerrado, todos los dinosaurios corren libres y salvajes, y el frágil sistema de vida de Isla Nublar está perdiendo toda estabilidad, cayendo en la anarquía. Mientras tanto, 6 campistas adolescentes se han quedado atrás en la isla después de perderse la evacuación, luchando por sobrevivir durante meses. Y una nueva y siniestra amenaza se acerca cada vez más.
Frustrados, los campistas se encuentran recorriendo la isla una vez más en busca de formas de escapar de una vez por todas de Isla Nublar. Esto los lleva a muchos lugares interesantes, tanto conocidos como nuevos. A medida que exploran la isla más profundamente, no solo llevan adelante su propia historia de supervivencia, sino que descubren muchos misterios nuevos en el camino, algunos de los cuales están muy relacionados con el misterioso dinosaurio nuevo con nombre en código «E750», que juega un papel importante en mantener a los campistas alerta.
Lo mejor de todo es que parte de la historia promete implicaciones de mayor alcance para la franquicia de formas muy interesantes.
Superando los límites de la imaginación
Parece que con cada temporada viene una mejora en la animación. Los dinosaurios continúan luciéndose, como protagonistas secundarios de la historia, y los personajes y entornos siguen evolucionando. Las piezas son emocionantes y siguiendo un hilo argumental lógico, superando los límites de la imaginación y la diversión sin romper con lo que esperamos de las películas. Y el escenario en el que se encuentran los protagonistas genera constantemente aventuras para ellos y para los espectadores por igual.
El misterioso E750 se siente más interesante de lo que pudiera parecer. Tiene algunas escenas verdaderamente aterradoras para tratarse de un producto de animación para todos los públicos. Y cuenta con una buena animación que realmente lo ayuda a destacarse de los dinosaurios e híbridos vistos anteriormente.
Los personajes evolucionan sus relaciones y vemos cómo aprenden a convivir con los dinosaurios, mientras que esos mismos conceptos se ven desafiados por la presencia del E750. La temporada está llena de crecimiento, tanto en la trama como en los protagonistas. Además, sigue manteniendo la tensión, y no solo ocasionada por los dinosaurios. Los personajes convincentes son clave para la saga de Jurassic Park, incluso cuando sus historias no siempre están entrelazadas con la franquicia más grande en su conjunto.
El vínculo de Darius, Brooklyn, Ben, Yaz, Sammi y Kenji como grupo continúa creciendo, no sin sus desafíos, ya que las relaciones entre el grupo se ponen a prueba, al igual que sus habilidades de supervivencia. Si bien no hay escasez de diversión en esta temporada, vemos un crecimiento humano real, ya que las relaciones evolucionan de manera convincente, mientras que su trauma, tanto fuera de la isla como dentro de ella, impulsa muchas de sus decisiones.
Los agujeros en el guion
Si algo es criticable en su guion es sin duda la falta de narración fuera de Isla Nublar. Dave y Roxy, quienes se vieron obligados a salir de la isla dejando atrás a los niños, ¿han aceptado que están muertos o siguen luchando por su rescate? Por no hablar de los padres de todos estos campistas, en especial el padre de Kenji, quien se supone que es rico.
Otra historia que se pasó por alto en la segunda temporada es Mantah Corp. La empresa de bioingeniería recibe algunas pequeñas menciones, pero la han dejado de nuevo aparcada. Pensábamos que la organización jugaría un papel mucho más importante, especialmente después de la intriga y amenaza con la que fue presentada en la primera temporada.
La temporada 3 se ha beneficiado de una extensión del número de episodios, utilizando el tiempo de historia adicional al máximo. Los dos episodios de más son algunos de los mejores que la serie ha ofrecido hasta ahora, con altas tensiones en un final perfectamente ejecutado. En general, hace que la historia finalmente se sienta más grande y se alinea aún más con la trilogía de películas de Jurassic World.
Esperando más aventuras
La tercera temporada regresa a las raíces establecidas en la primera temporada. El tono es creíble, hay mucho en juego y la narrativa sigue un hilo razonable, aunque quizás retenida por un elenco formado solo por niños. Eso sí, permite que el programa vuelva a atraer a los fanáticos de todas las edades, especialmente los más pequeños. Aunque quizás no esté a la altura de los estándares de animación de televisión, Jurassic World: Campamento Cretácico tiene mucho que ofrecer en una franquicia llena de aventuras. Esta temporada muestra que el programa en sí tiene el potencial de convertirse en una serie animada de primera clase. Jurassic World: Campamento Cretácico ciertamente ha demostrado su valía, lo que debería justificar un presupuesto más alto que permita una mejora visual y una narración más trabajada.
Desde momentos nostálgicos hasta piezas bien elaboradas, dramas de personajes convincentes y una historia cautivadora, esta ha sido la mejor temporada hasta la fecha, y estamos ansiosas por ver cómo evoluciona la historia y hacia dónde se dirige.