Léa, Marc, Karine y Francis son dos parejas de amigos de toda la vida. Cada uno desempeña un papel típico en un grupo de amigos y en cada matrimonio. Todo permanece en un statu quo hasta que Lea, una persona discreta e indecisa, comenta que está escribiendo una novela. Esto desatará una tormenta en el grupo y cada uno reaccionará de una forma diferente al éxito de ventas en que se convierte el libro de Lea. Envidia sana nos trae al primer plano, tal y como su nombre indica, la envidia. La envidia que todos hemos sentido alguna vez ante el éxito de alguien cercano. Una envidia sana mezclada con un poco de admiración y en ocasiones no tan sana.
Una comedia que no se queda en lo absurdo ni en lo cómico, sino que se vale de la comedia para contar situaciones comunes que hemos vivido todos. Los protagonistas, algo exagerados a veces, no caen en la caricatura. Todo lo contrario, representan muy bien esas situaciones mencionadas. Los cambios y las situaciones en los que en ocasiones muchos acabamos sin saber muy bien cómo, pero que ocurren.
Sin duda, los actores han sabido personificar muy bien sus papeles dentro de la historia, donde se mezcla la falsa amistad, el cariño y amor dañino. En definitiva es una plasmación de la amistad y el amor en su forma más mundana. En cómo unas amistades tan establecidas pueden cambiar de la noche a la mañana. Todo cambia a su alrededor, pero realmente ninguno de ellos ha cambiado, simplemente las cartas se han levantado sobre la mesa. Es decir, nos enseña con una pizca de humor, lo complicada que es la vida en las relaciones sociales.
Envidia sana es una cinta muy entretenida, divertida y recomendable. Porque aunque sea ficción, todos hemos vivido historias similares, interpretando a cualquiera de los cuatro protagonistas.
La película se estrena este jueves 24 de junio en cines.