456 personas. Un recreo infantil. Una competición mortal. ¿Todavía no conoces la serie coreana que ha arrasado en Netflix? Aquí os dejamos nuestras impresiones de El juego del calamar.
Escrita y dirigida por Hwang Dong-hyuk, el thriller de supervivencia surcoreano El juego del calamar se convirtió en un gran éxito en Netflix casi de la noche a la mañana. El programa mantiene las cosas simples en su episodio piloto, centrándose en un solo personaje principal, Seong Gi-hun (Lee Jung-jae), cuya adicción al juego lo ha llevado a endeudarse y temer por su propia seguridad. Cuando un extraño bien vestido lo invita a jugar a una serie de juegos por mucho dinero, Seong acepta de buena gana. Luego es llevado, a un lugar misterioso, donde se despierta con otros 455 jugadores, con vidas similares a las suyas, que han acordado el mismo trato.
Cuando se les plantea el primer juego, un juego infantil que todos conocemos, ganar dinero parece fácil. Pero cuando fallar resulta tener consecuencias mortales, todo el mundo parece dispuesto a abandonar. Aun así, sus vidas precarias junto a la gran suma de dinero que se les presenta, los lleva a continuar, conociendo ahora las consecuencias de perder.
El segundo episodio nos introduce al grupo central de personajes principales que la serie irá desarrollando. Cho Sang-woo (Park Hae-soo), un chico de oro conocido de Seong que ahora es buscado por la policía por malversar a millones; la fría carterista norcoreana Kang Sae-byeok (Jung Ho-yeon), que está tratando de recaudar suficiente dinero para que sus padres crucen la frontera; el anciano Oh Il-nam (O Yeong-su), que tiene un tumor cerebral terminal y no tiene nada que perder; el vicioso gángster Jang Deok-su (Heo Sung-tae), que está conectado con Kang; la enigmática Han Mi-nyeo (Kim Joo-ryoung), una manipuladora experta; y el aparentemente ingenuo Abdul Ali (Anupam Tripathi), un inmigrante paquistaní que intenta mantener a su familia.
Hwang Dong-hyuk mantiene las cosas en movimiento a un ritmo decente en todo momento en un escenario lleno de tensión, especialmente en lo que respecta a los juegos en sí. El diseño de producción es impresionante, especialmente en el recinto donde se lleva a cabo el juego, que combina colores brillantes, misteriosos símbolos y secretos en cada esquina. El juego del calamar está lleno de giros y más giros. El guion además ofrece una sátira cínica sobre la codicia, el egoísmo y el juego. Cada actuación destaca, en especial Seong a quien le coges cariño casi desde el minuto uno.
¿La recomendamos? Parece que realmente no es necesario hacerlo, ya que el mundo entero parece haberse fijado en ella. El juego del calamar es convincente y tiene muy buenas actuaciones. Si este no es tu género habitual, al final del primer episodio sabrás si estás dispuesto a seguir viéndola. Incluso si este tipo de ficción no es tu género habitual, vale la pena echarle un vistazo. Más allá de toda la muerte que el programa presenta, están los temas y la crítica social que te hacen pensar y que siempre es señal de una gran narración.
El juego del calamar es un thriller de supervivencia bien realizado que mezcla tensión, momentos impactantes y humor negro que combinan en una gran producción.
