A nadie se le olvida aquel maravilloso 1995 en que se estrenó ‘Toy Story’, esa película en que los protagonistas eran juguetes y se relataban las aventuras que vivían cuando los humanos no estaban observando. Desde ese día otros muchos juguetes han estado en la gran pantalla, y esta vez es el turno de UglyDolls. Gracias a Diamond Films hemos podido verla y esto es lo que nos ha parecido….
Peluches con voces de artistas
La trama parte de la idea de que los juguetes se crean para dar felicidad a todos los niños del mundo. Pero antes de hacer esa función, tienen que ser entrenados en una ciudad mágica y bonita, donde todo es perfecto. Pero eso no es así para todos los juguetes, los UglyDolls (los juguetes que salen imperfectos) son la excepción. Ellos viven en UglyVille, un bonito pueblo en que nadie es mal visto, donde nadie juzga a nadie por como es, y donde el sentimiento primordial que hay es felicidad y amor. Pero esta calma y tranquilidad se verá alterada cuando la adorable Moxy decide salir a investigar qué hay más allá de UglyVille….
La voz de estos adorables protagonistas la dan Kelly Clarkson, Nick Jonas, Pitbull y Emma Roberts (entre otras muchas más).
Un musical de lo más contagioso
Entrando en materia creo que la película cojea en determinados aspectos, pero brilla en otros. Empezaré por lo segundo.
Como he dicho, las voces protagonistas de la película son Clarkson, Jonas, Pitbull y de otros artistas del ámbito musical. En otro tipo de proyecto la idea podría disgustarme, me cuesta mucho ver a ‘famosillos’ en la gran pantalla, pero el hecho que la película de animación sea del genero musical hace que vea con buenos ojos el casting.
Y es que, el punto fuerte de la película no es ni su historia ni sus personajes (que ya hablaremos de ello mas adelante), es el apartado musical. Las canciones son muy pegadizas, consiguen que te animes en la sala cuando las oyes y ‘te vengas arriba’. Este apartado sí que es redondo.
Seguido de la música está el apartado visual, que comentaremos rápidamente. Visualmente la película es muy colorida, imaginativa y graciosa. Los diseños de los protagonistas son de lo más simples, pero también de lo más efectivos. La construcción del lugar de residencia de los protas (UglyVille) es del todo original y curioso.
Apto para niños. No apto para adultos
Ahora, centrándonos en la historia en sí, no todo es tan brillante ni perfecto. El problema no es el mensaje que tiene la historia, al contrario, el mensaje es algo muy positivo en la película, una metáfora sobre el hecho de que por ser diferentes no somos peores y que hay que aceptar la diversidad. El problema repercute en cómo se lleva a cabo el mensaje. A medida que vemos la película nos damos cuenta que tanto guión como personajes son muy muy básicos (padecer de cierta previsibilidad durante el transcurro de la película), son excesivamente ‘infantiles’.
Hay muchísimos diálogos a lo largo de la película donde el humor es muy básico y sencillo, donde las conversaciones entre personajes dejan mucho que desear y con el que cuesta seguir el hilo (por un tema de interés).
Es decir, a los/as peques de la casa les divertirá y se entretendrán, pero los que ya tenemos unos años de más que los acompañemos o que vayamos a verla solos/as nos parecerá más sosa que divertida. En mi opinión las películas distribuidas a un público infantil deberían tener elementos por los que el público adulto también pueda disfrutar de ella, y esta no llega a cumplirlo.
Conclusión
Aunque visualmente y musicalmente hablando esté a un buen nivel, la película arrastra una historia, un guión y unos personajes excesivamente infantiles y previsibles. A los niños les encantará, a los adultos no tanto. Pero dejando de lado sus cosas positivas o negativas, lo importante de la película es su mensaje de inclusión y rechazo a castigar lo diferente, si ese mensaje cala en los niños y niñas que van a verla, entonces la película ya ha hecho su función
Jajajaj, pues que mal que no puedas disfrutar una pelicula para niños sin que tenga contenido para adultos! De eso se trata volver a ser niño, cuando tienes un hijo.