Este viernes 21 llega a salas españolas Agentes 355, la nueva película de Simon Kinberg (Dark Phoenix) protagonizada por Jessica Chastain, Penélope Cruz, Diane Kruger y Lupita Nyong’o. La nueva película de los productores de la saga Bourne espera hacerse su hueco en taquilla. ¿Lo conseguirá?
Evitar la 3ª Guerra Mundial
Cuando un arma ultra secreta cae en manos de unos peligrosos mercenarios, la agente especial de la CIA, Mason «Mace» Brown (Jessica Chastain) debe unir fuerzas con la agente alemana Marie (Diane Kruger), la ex aliada del MI6 y especialista en informática Khadijah (Lupita Nyong’o), y la experta psicóloga colombiana Graciela (Penélope Cruz), en una misión letal y vertiginosa para recuperarla. Juntas deberán superar sus conflictos personales y utilizar sus talentos y experiencia para salvar el mundo.
Querer y no poder
Siempre da gusto empezar el año con una película de acción que te evada de la realidad durante un tiempo. El problema es cuando la película no consigue despegar aun tener elementos que darían para ello. Agentes 355, es ese tipo de película.
Si nos centramos en su elenco, no hay ni una pega, las cuatro actrices protagonistas están estupendas. Ya no solo la química entre ellas o como se hacen suyo el personaje, sino en las propias secuencias de acción se nota que se lo están «pasando pipa”. En concreto, Chastain y Kruger están sensacionales repartiendo mamporros, haciendo saltos imposibles entre edificios o disparando a «diestro y siniestro».
Ligado a ello tenemos la dirección de Kinberg, que es desastrosa. Es algo bastante corriente ver pasar a muchos guionistas del papel a la cámara, guionistas que expanden su conocimiento escribiendo historias a la dirección de la propia película que adapta. Esto a veces funciona, como ejemplo reciente tenemos a Aaron Sorkin, pero otras veces sale mal, como es el caso de Kinberg.
Una mala dirección en este tipo de películas es algo que no se puede perdonar. La dirección de Kinberg es vaga, confusa y no trasmite nada. Al director ya le ocurría en su anterior película, X-Men: Dark Phoenix, y parece que no ha aprendido nada de sus errores. Una lástima, ya que, si ese apartado hubiera estado más cuidado, la película hubiera sido mucho más entretenida.
Dos aspectos que sí me han sorprendido han sido la producción y la banda sonora, curiosamente lo que consigue salvar (conjuntamente con las actrices) ese fallo en la dirección.
El nivel de producción es sorprendentemente alto. Sin ser una franquicia / saga / universo conocido anteriormente, hay un nivel de producción muy correcto el cual emula (en el mejor de los sentidos) productos de primera calidad.
La banda sonora corre a cargo de Tom Holkenborg (aka Junkie XL), compositor de películas como Mad Max: Fury Road o Deadpool, películas con una música siempre muy cuidada, adictiva y frenética; como en este caso. No nos confundamos. No tiene un tema que al salir de la sala mantengas en tu cabeza durante días, pero si funciona a la perfección dentro de la película.
Para acabar, el guion (Theresa Rebeck y Simon Kinberg). Creo que es el verdadero talón de Aquiles de la película. Si esto es así es debido a dos problemas: El primero, partir de una historia mil veces vista, lo que hace que se vuelva predecible.
Lo segundo, alarga demasiado la historia. Todo lo que ocurre en la última media hora es innecesario. Si la historia hubiera cerrado las tramas antes de sus últimos treinta minutos la película no daría esa sensación de fatiga.
Conclusión
Agentes 355 cuenta con Chastain, Cruz, Nyong’o y Kruger pasándoselo la mar de bien en una historia mil veces explicada, pero que en determinados momentos es efectiva. Ahora, su excesiva duración y una dirección muy básica de Kinberg lastran mucho la película.
