Hace poco terminé la primera temporada de esta encantadora adaptación de las novelas de Lucy Maud Montgomery, una nueva y fresca visión de la vida de la joven Ana, que podéis disfrutar en Netflix. Desde aquí os la recomendamos y os damos motivos para visitar Tejas Verdes.
La historia
Esta serie canadiense nos sumerge de lleno en el mundo de una niña de trece años llamada Anna, quien, por casualidades de la vida, termina en un pequeño hogar, llamado Tejas Verdes, y a partir de ahí, vivirá un sinfín de aventuras, convirtiendo situaciones de la vida cotidiana en grandes proezas características de las historias de heroínas que aparecen en sus lecturas favoritas.
Os lo he adornado bien, ¿verdad? La idea es no contaros demasiado y tentaros lo suficiente para darle una oportunidad. Si os gustan las series de época, y del estilo de “Heidi” o “Marco”, esta vez vuestra serie. Tal vez ya conocíais alguna de las versiones anteriores que hicieron de las novelas; en mi caso, solo las conocía de oídas. Eso ha sido un punto a favor para mi disfrute personal, pues todo ha sido nuevo para mí, no la vi condicionada por nada, por ninguna idea en concreto, y el resultado ha sido maravilloso.
Personajes entrañables
El personaje principal interpretado por la joven Amybeth McNulty te atrapa desde el primer momento. Tras visionar el episodio 1, supe que vería los siguientes y que probablemente me quedaría con ganas de más, y así ha sido. Y uno de los motivos es Anna, una niña muy viva, con una imaginación ilimitada, con un pasado muy tormentoso, pero con un futuro esperanzador.
El resto del reparto es increíble. Geraldine James, una de las caras más conocidas de la serie, destaca en su interpretación como Marilla Cuthbert, así como R.H. Thomson dando vida a Matthew Cuthbert, quienes viven en Tejas Verdes y cuyas vidas cambiarán con la llegada de esa niña pelirroja y risueña.
A medida que avancéis en la historia, conoceréis nuevos personajes que os encandilarán, interpretados por jóvenes actores con mucho potencial.
Música y fotografía brillantes
Sin duda, estos dos elementos embellecen la trama de cada episodio. El Sur de Ontario y Prince Edward Island son algunas de las principales localizaciones de la serie que, junto con un buen trabajo por parte del equipo artístico, nos permiten disfrutar de unos planos en exterior bellísimos.
El opening es muy particular. Moderno, pero a la vez con una estética muy romántica, muy acorde con el aire nuevo que aporta esta adaptación.
Volveremos a Tejas Verdes
En principio, la segunda temporada será estrenada este año, todavía no se conoce la fecha exacta. Pero ya están grabando en varios lugares de Ontario, según Northwood Entertainment. Así que todavía estáis a tiempo de poneros al día, y esperar con ganas más aventuras de Ana, como yo.
Es posible que no sea la mejor adaptación de las novelas. Sin embargo, “Anne with an E” ha sido el primer contacto que he tenido con el personaje, y he quedado prendada de este. Así que, siguiendo recomendaciones, en un futuro no muy lejano, me sumergiré en las páginas de sus libros mientras aguardo el reencuentro con Anna y compañía en Tejas Verdes.